Significado de unitarización aplicado en la logística
La unitarización es una parte importante del proceso logístico, que implica la clasificación y organización de mercancías en unidades para facilitar su transporte. Es necesaria para la gestión eficaz de un almacén o cadena de suministro y ayuda a garantizar que el producto se entrega de forma segura y a tiempo.
El término unitarización deriva del término latino «unitarium», que significa «agrupación de unidades». Se trata de un proceso que consiste en dividir una gran cantidad de mercancías en unidades individuales para su envío. Esta técnica se utiliza para optimizar el embalaje, el etiquetado y la eficacia del transporte de mercancías. También se utiliza para gestionar el inventario y maximizar el espacio de almacenamiento, así como para reducir los costes laborales y los retrasos en los envíos.
Beneficios de la unitarización
La unitarización ofrece una serie de ventajas sobre los métodos tradicionales de embalaje y transporte. Las principales ventajas de la unitarización son:
Mayor eficacia: La unitarización puede ayudar a optimizar todo el proceso logístico, desde el pedido y la recogida hasta el embalaje y el transporte. Simplifica el proceso y reduce el tiempo necesario para la gestión del inventario. Además, la agrupación de artículos en unidades ayuda a que el proceso de clasificación y embalaje sea más eficaz.
Costes de mano de obra reducidos: Al unitarizar las mercancías, los costes de mano de obra pueden reducirse significativamente, ya que se necesita menos personal para manipular la misma cantidad de mercancías. Además, se pueden evitar menos retrasos en los envíos y menos artículos perdidos o extraviados.
Control de inventario: La unitarización puede ayudar a garantizar la precisión de la gestión del inventario. Al organizar los productos en unidades, es más fácil hacer un seguimiento de la cantidad de mercancías que están en tránsito y de su paradero. Esto facilita la identificación de cualquier discrepancia entre los pedidos y los envíos reales.
Mayor seguridad: La unitarización facilita la protección de las mercancías mientras están en tránsito. Esto se debe a que los artículos se agrupan en unidades, lo que proporciona una capa de protección que los artículos individuales pueden no tener. Esto ayuda a reducir el riesgo de daños y robos durante el proceso de envío.
Procesos que examina la unitarización
La unitarización es una práctica habitual en el sector de la logística, ya que ayuda a agilizar el proceso de embalaje, etiquetado y transporte de mercancías. Incluye una serie de procesos que deben completarse para que los productos se envíen de forma eficaz y segura de un lugar a otro. Los siguientes son algunos de los procesos que examina esta técnica:
Recogida de pedidos: La preparación de pedidos es el proceso de selección de artículos de un almacén para su envío. Durante este proceso, los artículos se agrupan en unidades para identificar con eficacia y precisión lo que contiene cada envío.
Etiquetado: Para que los clientes puedan identificar fácilmente el contenido de sus envíos, cada unidad debe estar claramente etiquetada. El etiquetado es una parte importante de la unitarización, ya que ayuda a garantizar que los productos se contabilizan con precisión y que llegan a su destino sanos y salvos.
Carga de unidades: Una vez agrupados los artículos en unidades, hay que cargarlos en un vehículo o contenedor para transportarlos. La carga en unidades ayuda a garantizar que las mercancías estén seguras y que lleguen a su destino en las mismas condiciones en las que se enviaron.
Embalaje: El embalaje es un aspecto importante de la unitarización, ya que es necesario para proteger los artículos frágiles durante el transporte. Según el tipo y la cantidad de artículos que se envíen, puede ser necesario un embalaje especializado para evitar que sufran daños.
Seguimiento: El seguimiento es una parte esencial de la unitarización. Ayuda a seguir el progreso de un envío y garantiza que las mercancías lleguen a su destino a tiempo.
Conclusión
La unitarización es una parte importante del proceso logístico, ya que ayuda a aumentar la eficacia y a reducir los costes laborales. Al agrupar los artículos en unidades, los envíos se pueden etiquetar correctamente, embalar correctamente y realizar un seguimiento eficaz. Es una herramienta esencial para gestionar el inventario y garantizar que las mercancías lleguen a su destino seguras y a tiempo.